Bien decían las abuelas ese famoso refrán cuando lo veían a uno desesperado tratando de hallar lo que se consideraba irrecuperable. Pues bien, desde hace más de un año y por diversas circunstancias (muerte temporal de mi pc, falta de Internet en casa, trabajo de oficina sin conexión a Internet -¡En pleno siglo XXI!- y, he de admitirlo un poco bastante de desidia de mi parte) yo consideraba a este blog perdido hasta el punto que ni los famosos bailecitos a San Pascual Bailón, a quien también recurrían las doñitas parecían capaces de hacerlo aparecer.
La banda sonora dejó de ser registrada por escrito, es verdad, pero nunca dejó de sonar 7 por 24 los 365 días del año. Es mucha la música que he escuchado en este tiempo de abandono, así que mucha será la música que comentar y compartir. Por motivos personales-técnicos de mi conexión a Internet y mi propia PC, cambiaré un poco la modalidad de este blog. Al menos de momento no compartiré links de descarga, mas sí mis reseñas, comentarios o pensamientos sueltos de los músicos y artistas que se pelean por entrar en el original soundtrack de mi cocorota.