jueves, abril 30, 2009

Un fuera de época: Alessandro Moreschi, el último castrado

En una interesante conversación de fin de semana, si mal no recuerdo mientras veía la Fórmula 1, conocí a la simpática y nefasta soprano norteamericana Florence Jenkins (la Del Pino y Lamas del mundo de la ópera... si no sacaba ese comentario intenso y letrado no sería yo, por cierto :P ). Por alguna extraña asociación mental, al escuchar sus berridos destemplados recordé la voz de un pobre hombre quien ha pasado a la historia de la música como el último superviviente de un timbre vocal hoy extinto: el castrado, voz "artificial" lograda al extirpar los testículos de los niños aún no desarrollados, a fin de conservar su voz aguda y aumentar su potencia y registro de acuerdo a las características físicas de la caja torácica masculina.

Alessandro Moreschi fue un cantante italiano nacido en Roma en 1858. Para esa época la Iglesia Católica, en un acto de humanidad que bien puede catalogarse hipócrita (pues fue la misma Iglesia quien "creó" el monstruo del cantante castrado al considerar pecaminosa la voz femenina y promover estas operaciones quirúrgicas a los niños impúberes, generalmente de los más bajos estratos sociales), había prohibido las castraciones. O mejor dicho, fue una especie de concesión al poder civil impuesto en Italia hacia 1870. Sin embargo, por un juego del destino, Alessandro Moreschi tuvo que ser sometido a la extirpación de sus testículos en 1865, para curarlo de una hernia inguinal según la costumbre de la época. Digamos que Moreschi pasó a la historia por culpa de cinco años de adelanto al decreto de prohibición. Un fuera de época literalmente.

Como su familia era muy pobre y numerosa, Alessandro Moreschi siguió el destino de todo niño italiano del siglo XIX, pasar a la tutela de un maestro de música, en este caso Gaetano Capocci,  organista y compositor de música de iglesia. Era el año 1871... tarde, muy tarde para obtener una óptima formación musical acorde con su tipo de voz. Los maestros de canto especializados en la técnica vocal de los castrados habían desaparecido junto a la práctica de esta operación. Además el último castrado famoso, apellidado Velutti, había abandonado las tablas treinta años atrás, y poco se conservaba teórica y prácticamente de la técnica de estos fenómenos (quirúrgicos) de la naturaleza. En consecuencia, de nuevo Moreschi llegó tarde...

¿Cómo Alessandro Moreschi ingresó en 1883 al coro de la Capilla Sixtina estando prohibido el uso de cantantes castrados? Sencillo. Logró encontrar un "vacío legal" pues su operación fue antes del decreto. Fuera de época, pero con suerte. La misma suerte que le permitió registrar su voz en 1902 en una grabación sonora, rarísima, de una calidad muy pobre pero indispensable para todo el amante del canto lírico. Honestamente, no poseía una voz agradable ni hermosa. Y siendo más sincera todavía, oírlo me causó una desagradable sensación.

A veces soy muy impresionable, y tras haber leído mucho sobre la vida de estos cantantes, amar con locura la película Farinelli, y obsesionarme con la idea de cómo sonarían sus voces de verdad (siendo lo más cercano a ese registro los contratenores actuales), escuchar la casi fantasmagórica voz de castrado soprano de Moreschi me puso los pelos de punta. Siendo justa, puede culparse por un lado a la precaria calidad de audio de la grabación, a la pobre formación musical con que contó Alessandro y al repertorio religioso que interpretaba (la voz de castrado era ideal para el repertorio barroco, por su agilidad, extensión y florituras)... sí, repertorio que muestra una vez más como este hombre estuvo siempre un paso atrás en el tiempo... o adelante... ya ni sé.

Me había prometido una reseña muy corta, y vean lo que me ha salido. Sin más, una pequeña muestra del arte de Alessandro Moreschi:


Y como comentario al margen, qué maravilloso trabajo de musicología e ingeniería de sonido hicieron para recrear de manera artificial la voz de los castrados en Farinelli:


Fuentes:

http://kishimotoandres.blogspot.com/2005/12/alessandro-moreschi-el-ltimo.html

http://www.filomusica.com/filo23/jenri.html

http://www.lamaquinadeltiempo.com/algode/castrati.htm

Share/Bookmark

4 comentarios:

  1. ya e iba adecir eso, sino habias visto esa peli, farinelli ill casrao, me parece excelente y mas con los dialogos multilingues
    Excelente

    ResponderEliminar
  2. francamente me parece un desatinado comentario.. estamos hablando de alessandro un cantante que vivio en tiempos donde la tecnologia no existia... me parece que te fasciono la pelicula de farinelli y comparas esta voz "arreglada" con la de alessandro... hoy en dia hay cantantes que no cuentan con una tecnica vocal exquisita pero sin embargo son famosos, porque? quien lo sabe... pero mas alla de del comentario en si, noto un cierto grado de desprecio por los cantantes castrados... porque sera? bueno enfin.. lo unico bueno de tu "comentario" es que pusiste a disposicion la voz de alessandro la cual encuentro interesante, tmbien un extracto de la pelicula de farinelli a modo de tonta comparacion... la cual no vi pero seguro es intereante tmbien... saludos
    jorge
    jam4600@hotmail.com

    ResponderEliminar
  3. Primero que nada, Jorge, muchas gracias por pasar.

    Y en segundo lugar, no soy crítica musical ni palabra es la Biblia, la idea de este blog es hacer comentarios subjetivos sobre la música y los artistas que me generen interés, si buscara rigurosidad absoluta, hubiera estudiado musicología. Como aficionada te respondo: no siento desprecio alguno por los cantantes ni la voz de castrado. Me llama la atención el fenómeno del castrado dentro de la historia musical, sobre todo los condicionantes socioeconómicos, religiosos y artísticos que hicieron posible que los castrados hayan cobrado la importancia que tuvieron durante el barroco musical. No estoy descubriendo nada nuevo bajo el sol, autores como Kurt Pahlen (Grandes voces de nuestro tiempo) o Ethan Morden (El espléndido arte de la ópera) se encargan de estudiar a fondo y rigurosamente las ideas que, en tono medio jocoso, desgrano en mi reseña.

    Y sobre Farinelli, no, no comparo ni pretendí hacerlo. La voz de Moreschi, le guste o no a uno, es una voz real, la de la película es una reconstrucción que resulta fascinante como experimento de ingeniería musical. La película tampoco es que sea fiel a la historia, falsean la biografía de Carlo Broschi y le dan matices novelescos y tintes eróticos que hasta donde sé no fueron reales en la vida de quien fuera el castrado más famoso de la historia. Como sea, te invito a verla, la pudieras disfrutar.

    ¡Saludos!

    ResponderEliminar
  4. gracias por publicar la exquisita voz de alessandro moreschi , y pues para para todos los hombres , si quereis cantar , pues que le castren

    ResponderEliminar